Louis Vuitton crea su Maison en 1854.
Desarrollando su actividad original de maletero, haciendo retroceder sin cesar los límites de la perfección, Louis Vuitton imprime a sus artículos su pasión por la calidad y la innovación, una cultura del savoir faire perpetuada por sus herederos.
Aprovechando lo mejor de cada avance hacia la perfección técnica, sin olvidar nunca su precisión artesanal, Louis Vuitton conquistó el primer puesto. Una búsqueda absoluta para convertirse hoy en el emblema del lujo moderno.
Once símbolos individuales, once instantáneas para forjar una historia, once objetos de culto para crear una leyenda.
LOUIS VUITTON presenta sus iconos
Desde sus orígenes, la ambición de la Casa Louis Vuitton
era proponer a los distinguidos cosmopolitas que prepararan sus
preciosas compras antes de realizar sus peregrinaciones, en ocasiones
extravagantes. La serie de Wardrobes se creó en 1875,
para ofrecer a los viajeros la posibilidad de transportar todos sus
efectos personales en un solo equipaje, incomparablemente resistente
gracias a su estructura de madera y a su revestimiento de piel o de tela
recubierta.
Las proporciones prácticamente equivalentes al número áureo, los herrajes y remaches, el ropero para los trajes y vestidos, los cajones para la ropa interior y los sombreros y la multitud de detalles perfectos completan la alquimia que simboliza el Wardrobe.
Debido al auge de los viajes rápidos, particularmente en avión, era
preciso aligerar el equipaje, lo que habría podido hacer desaparecer el
legendario objeto.
Pero aún hoy los
viajeros exigentes se niegan a prescindir del único atributo que les
garantiza que sus objetos personales viajarán perfectamente protegidos y
organizados. Y para cerrar con broche de oro: la cerradura inviolable, cuya llave única está reservada a cada cliente para todas sus maletas Louis Vuitton, sin olvidar, obviamente, el placer extremo de poder disponer de su armario móvil en cada escala… Los Wardrobes, quinta esencia de las maletas rígidas, son el máximo exponente de una forma utilitaria que se ha convertido en objeto de culto.
Creado en 1901, en la época de los viajes trasatlánticos en barcos de vapor, el Steamer Bag era la respuesta a la necesidad de disponer de una bolsa de viaje complementaria que ofreciera una flexibilidad desconocida hasta la fecha.
Primer bolso de viaje flexible y plegable, el Steamer Bag
se guardaba en uno de los compartimentos de un baúl, a la espera de ser
utilizado en caso de necesidad. Resistente gracias a su base
rectangular rígida y excepcionalmente plegable, el Steamer Bag
está rematado por una solapa de pasantes con cierre de candado, cuya
asa excéntrica permite suspenderlo para llenarlo más fácilmente.
El precioso objeto posee la elegancia infinita de la sencillez atemporal.
Aliado eterno de los viajeros en vacaciones, a lomo de camello o en
cabina, su contenido polivalente hace de él una bolsa de viaje
complementaria siempre actual.
Imagen de la Casa Louis Vuitton, el Keepall, al igual que el Steamer Bag, se lanzó en versión de tela en los años 30 como bolsa de viaje complementaria doblada en el fondo de los numerosos baúles de los elegantes viajeros.
En el transcurso del siglo XX, edad de oro del transporte aéreo, el Keepall se impone como el equipaje de mano original. Prototipo de la bolsa de viaje de fin de semana, el Keepall personifica los cambios de mentalidades.
Sus usos múltiples simbolizan una nueva forma de viajar, un individualismo exigente amante de libertad.
El Speedy, arquetipo del bolso flexible polivalente, fue imaginado por primera vez en los años 30. Su forma sencillísima y generosa, fácilmente identificable por las incondicionales del Keepall, su hermano mayor,
lo impuso inmediatamente como el cómplice evidente de los viajes
modernos, y su ligereza y polivalencia fueron percibidos rápidamente
como ventajas indispensables.
En los años 60, se crea un nuevo tamaño para Audrey Hepburn. 

Bolso de ciudad
muy práctico, el Speedy se impone como uno de los primeros complementos
de la mujer moderna, y forma parte de varias historias: la de Louis Vuitton, obviamente, pero también la del cine y la moda.
El bolso Noé fue diseñado y fabricado en 1932 por Gaston Louis Vuitton. Su forma fue imaginada como respuesta al pedido original de un productor de Champagne: un bolso que permitiera transportar varias botellas.
Esta versión de piel será la única hasta que, en 1959, se inventó el estampado Monogram flexible.
El bolso bombonera de cuello anudado,
disponible en este nuevo acabado revolucionario, se convierte en un
artículo fetiche de la moda, en el complemento polivalente de las
mujeres activas y distinguidas, sin compromisos. Disponible en varios tamaños y diversas materias, es uno de los grandes clásicos de la Maison.
El Lockit es un bolso creado en los años 50, cuya forma es arquetípica. Redescubierto recientemente en los archivos de la Maison, el Lockit se reedita en 2006, convirtiéndose en el nuevo icono de Louis Vuitton.
Inmediatamente elevado a la categoría de mascota de la Casa, el Lockit representa uno de sus temas más preciados, la alianza armoniosa de las líneas rectas y curvas, de la sencillez y de la elegancia chic.
Práctico, el Lockit es el cómplice de las mujeres activas que, además de sus secretos, pueden transportar documentos perfectamente protegidos por el ahora legendario cierre de candado.
Un renacimiento propuesto en las materias emblemáticas de la Maison, el estampado Monogram y la piel natural Nomade.
El bolso Alma fue creado en 1934 y una de sus primeras incondicionales fue una ilustre diseñadora francesa de moda: Mademoiselle Coco Chanel.
Reinventado y depurado al estilo art déco en 1992, el bolso Alma se convierte de forma natural en uno de los emblemas de Louis Vuitton. Su forma de paralelepípedo cónico conjuga una portabilidad y una elegancia evidentes.
Quintaesencia de un bolso de ciudad polivalente, el bolso Alma se diseñó en varios tamaños y diversas materias. Marc Jacobs, que reinterpreta con gusto los iconos de la Maison para los desfiles de prêt-à-porter Louis Vuitton, recurrió al talento de Stephen Sprouse, y más tarde de Takashi Murakami, para crear series limitadas.
Rematado por elegantes asas de piel, el bolso cubo de Louis Vuitton es de linaje aristocrático, y no contiene avena para alimentar a los caballos en los hipódromos. Presente hoy con mayor fuerza en las primeras filas de los desfiles de moda, el Bucket se lanzó en 1968 en Estados Unidos como bolso de shopping.
A partir de 1980 fue adoptado por las japonesas,
que buscaban un bolso original que pudiera combinarse fácilmente con un
kimono, y desde entonces, seduce a la clientela de noctámbulas al
acecho de las nuevas tendencias de la moda.
El bolso Papillon rinde homenaje a las mariposas, en cuya apariencia aérea se inspira.
Reeditado en los años 60, fue adoptado inmediatamente por las modelos de las casas de alta costura que lo consideraron como un bolso minimalista y útil que, gracias a su forma tubular, permitía acceder inmediatamente a su contenido.
Twiggy, una de las primeras supermodelos, sigue siendo la figura emblemática de este bolso.
Creado por Gaston Louis Vuitton para proteger el material fotográfico de un explorador
que preparaba una expedición a la selva tropical suramericana, este
bolso utilitario de ángulos rectos fue adoptado por los jóvenes deseosos
de exhibir su espíritu de independencia.
Icono de las nuevas tribus urbanas, el bolso Amazone se ve hoy con más frecuencia en las calles de las grandes capitales que cerca del río Amazonas….
El Porte – documents Voyage es un ejemplo claro de la evolución imprevista de la función de una bolsa de viaje.
Imaginado en 1854 como funda protectora para las mantas de cachemir
que formaban parte del equipo básico de los primeros automóviles, su
forma rectangular y plana impuso de forma natural una nueva aplicación: proteger los documentos valiosos y los ordenadores portátiles de la intemperie, y más simplemente, transportarlos con elegancia.
La tienda Louis Vuitton de la Quinta Avenida, en Nueva York, puso a la vista de los transeúntes un recorrido histórico por el bolso Speedy, que puede apreciarse desde sus aparadores. Mediante una especie de riel, podemos ver cómo un Speedy va “convirtiéndose” en otro: desde el estilo típico de la firma hasta los adornos con flecos de colores o la versión más reciente.
Esta pequeña pero interesante exhicibición hace “viajar” al speedy de
una esquina a otra de los aparadores de la tienda y, en su paso por
unas atractivas cortinas de metal dorado, el bolso reaparece con el monograma renovado de la firma. Visualmente, es un pequeño espectáculo muy atractivo.
“Louis Vuitton ha escarbado profundamente en sus archivos para mostrar esta evolución del prominente bolso Speedy, desde el monograma clásico de 1932 hasta la versión con flecos multicolor o incluso el modelo 2009, el bolso Stephen Sprouse Roses.”
Infórmate de los estilos que Louis Vuitton
crea para sus bolsas. A menudo las marcas de imitación crean su propio
estilo y uso de colores.
Cómo identificar un Louis Vuitton falso?
Hoy en día que tan de moda está la compra de productos por internet es muy fácil caer en la trampa y adquirir un producto falso pensando que estamos comprando el original. En la red hay muchos estafadores que nos harán creer que lo que estamos adquiriendo es real, pero muchas veces no es así.
El precio: si es barato, no es original.
- Las puntadas: son las mismas y poseen un ritmo
regular. En el monograma de la base del asa siempre tienen que aparecer
cinco puntadas, sea cual sea el modelo.
- No todos los bolsos de Vuitton son fabricados en Francia. Encontrarás algunos que han sido fabricados en Alemania, Estados Unidos o Italia.
- En los bolsos originales las siglas LV están volteadas en una de las caras del bolso porque para la fabricación se utiliza una sola pieza de piel.
- Ten cuidado con las “O”. Si son muy redondas desconfía.
- LV no vende sus productos con descuento. Como máximo podrás conseguir un original al 15% de su precio pero no esperes mucho más.
- La empresa no coloca etiquetas colgando de los bolsos. Todas están adentro.
- Debajo del aro de metal o en un lugar dentro de la bolsa podrás ver el código único de producción que está formado por dos letras y cuatro números. El código cambiará dependiendo del país donde fue producido.
Instrucciones
Observa la colocación del monograma en el bolso, comúnmente conocido como el logotipo LV. La "V" debe estar un poco por encima de la "L", con la "L" que pasa por la parte inferior izquierda de la "V". Los bolsos de Louis Vuitton en general se confeccionan con una única pieza larga de cuero, lo que hace que el monograma sea simétrico en ambos lados.
Mira los patrones de costura a lo largo de la bolsa de Louis Vuitton.
La bolsa Speedy siempre tiene cinco puntos de sutura a través de la
lengüeta de cuero donde se encuentra con el mango. Compara, si es
posible, dos bolsos de Louis Vuitton de lado a lado para identificar el
número de puntos colocados en la bolsa, observando si la costura es la
mismo para cada bolsa.
Busca
en la bolsa que el monograma sea de un solo color, o que el texto sea
multi-color. Una bolsa de Louis Vuitton con varios colores en el
monograma puede ser signo de falsedad, ya que sólo el Speedy 30 y Milla
Pochette PM son multicolores. El Speedy 30 se puede identificar como una
bolsa de lona Damier con una forma redondeada, especialmente en los
lados, y la Milla Pochette PM es pequeña, identificable por la firma
metálica refinada que aparece en el punto central frontal superior de la
bolsa, y la fijación de la cadena de oro en ambos lados.
Observa
la fuente situada en el parche de autenticidad de la bolsa. Louis
Vuitton sólo utiliza una fuente específica para la totalidad de sus
bolsas, con las letras en mayúsculas, mismos espacios pequeños entre las
letras, y "O" s muy redondas. El texto sobre el parche en el interior
debe estar perfectamente centrado en la parte superior frontal, con
"Louis Vuitton", escrito en la parte superior, seguido por el lugar en
que se hizo, por lo general figuran como París, pero también puede
aparecer como EE.UU., Suiza, Alemania, Italia o España.
Verifica el precio de venta. Los bolsos auténticos de Louis Vuitton,
a partir de marzo de 2011, se han vendido por al menos 500€, según el
sitio web oficial de Louis Vuitton. Si bien los precios pueden variar
dependiendo de si va a comprar la bolsa en un centro comercial o de
segunda mano en los sitios de comercio, si la bolsa es real y digna de
buena calidad, va a pagar al menos 350€. Toda adquisición por una cifra
menor que 200€ será signo de probable falsedad.
Mochilas,
bolsas y piezas vintage deben ofrecer una coloración amarillo-verdosa.
La tapicería de cuero alrededor de la bolsa también deben tener costuras
amarillas con las tarjetas blancas de autenticidad. Estas son una parte
del conjunto de medidas que también incluyen una etiqueta de LV, y que
garantizan la autenticidad del producto. Estas deben de ser
proporcionadas al momento de la compra por el vendedor, o al lado de la
bolsa si se compra en línea. Cualquier costura que no sea de color
amarillo, o una tarjeta de autenticidad que sea de un color diferente al
blanco, demuestra que la bolsa no es auténtica.
La única manera de asegurar que usted
está comprando un auténtico Louis Vuitton es comprar el artículo
directamente desde su página web o una tienda de Louis Vuitton. Si una
bolsa es vendida en más de un lugar intenta verificar la autenticidad
del producto a través de la comparación entre ambas.
¿Quién lo lleva mejor?
Angelina Jolie
Ashley Tisdale
Ashley Tisdale enfunda su iPad con Louis Vuitton
Jessica Simpson
Angelina Jolie está perfecta.
ResponderEliminar