Jimmy-Choo a tus pies

La empresa nació a mediados de los años noventa, y desde entonces ha ido consolidándose en el gusto de las más exclusivas clientas del mundo, las estrellas del espectáculo.  Son modernos y suntuosos, y poseerlos es sinónimo de prestancia y glamour. Son realizados por el artesano de nombre homónimo, pero quien logró la expansión de ellos como objeto de deseo fue Tamara Mellon (quien se asoció al zapatero), editora de la sección de accesorios de la revista Vogue británica,  ya que según sus palabras no encontraba ningún zapato que respondiera a su estilo. Con un diseño artesanal, en el que se usan los más diversos materiales, más sus tacones altísimos se distingue en las fiestas y eventos más distinguidos, como los premios Oscar (por ejemplo la actriz española Penélope Cruz lució un par en la alfombra roja de este galardón). Y sus precios responden a su exclusividad, rondan entre los 400 y los 1.000 euros. La serie femenina de los Estados Unidos, “Sex and the city” (que ya fue adaptada al cine con gran éxito), les dio popularidad, aunque no tanto como lo logró con los emblemáticos Manolos. También la serie “Los Soprano” ayudó en la difusión de su nombre. La filosofía de la firma la resume Tamara, la presidenta y fundadora, de esta manera “no importa lo que uses, si tienes unos buenos zapatos y un buen bolso tu look estará perfecto”.

Jimmy Choo nació en Malasia en 1961 en el seno de una familia de zapateros, y él confeccionó su primer calzado a los 11 años de edad. Estudió en Cordwainers’ Technical College de Londres (en la actualidad esta escuela forma parte de London College of Fashion), donde se graduó en 1983. Abrió su primer taller en Hackney (al este de la capital británica), en el año 1986. Dos más tarde sus creaciones aparecieron publicadas en la Vogue británica, y adquirió fama internacional. En 1996 cofundó junto a Tamara Mellon la marca Jimmy Choo Ltd., y desde entonces se ha centrado en el trabajo de las colecciones producidas bajo la licencia de la marca, la cual se basa en la línea de zapatos lista para usar, y que incluye accesorios como bolsos.



Por su parte, Tamara Mellon (nacida en Londres en 1967), se formó en Beverly Hills, Inglaterra y Suiza, y comenzó su carrera en la empresa Phyllis Walters Public Relations. Luego se desempeñó en la firma Mirabella, hasta que en 1990 se incorporó a la revista Vogue UK la cual la contrató como editora de la sección de accesorios. En 1996 buscó al artesano del calzado Choo, con el objetivo de crear una compañía de zapatos femeninos prêt-à-porter, y así fue como su visión de negocio le hizo ganar terreno en esta área de mercado. Y fue gracias a ella que las celebridades comenzaron a elegir este calzado para llevar, sobre todo, en importantes encuentros públicos. A comienzos del nuevo milenio, en 2001, con la idea de expandir la marca, Mellon hizo un acuerdo con la multinacional Equinox Luxury Holdings Ltd., la cual compró la firma de complementos, mientras Choo siguió como responsable de la compañía. Al poco tiempo las tiendas de la marca se expandieron por el mundo, teniendo todas una estética similar, al estar decoradas al estilo de los años 40. Para el año 2004 Hicks Muse adquirió a Jimmy Choo, y de esta manera, se ha incrementado la demanda de las distintas líneas de accesorios, incluyendo la de bolsos. Finalmente, para febrero de 2007 Jimmy Choo fue adquirida por los socios de TowerBrook Capital, siguiendo Tamara Mellon al frente de la empresa colaborando con la directora creativa de la misma, Sandra Choi. En junio de ese año, Joshua Schulman se unió a Jimmy Choo como CEO, sucediendo a Robert Bensoussan. También en 2007, la marca se expandió con la apertura de unas 60 tiendas.

En el año 2006 con motivo de su décimo aniversario la marca lanzó una colección vintage. Para ello reeditó diez de los modelos más emblemáticos de su historia, los cuales se distinguían por una estrella dorada pintada en la suela, y por estar empaquetados en cajas especiales con los colores de la firma. Algunos de estos modelos fueron: la sandalia de leopardo realizada en piel y seda; Tabatha -con cristales y brillantes-, Logo Shoes -una sandalia en color negro con tacón de 10 cm.-, Bamby -con cristales de Svarowski-, Tosca -bailarinas de color negro con un poco de tacón y una tira en la parte delantera- y el modelo Bota en caballo -con animal print-.

Pero además de sus sandalias y botas, la marca cuenta con una línea de bolsos y carteras de mano (también adoradas por las famosas), más complementos y una nueva línea de gafas. Para este paso significativo en el sector eyewear, la marca firmó un acuerdo de licencia mundial con la casa Safilo para la producción y la distribución de la primera colección de gafas, que están disponibles desde enero de este año. Las colecciones se venden en las boutiques de Choo que tiene repartidas por todo el mundo (Estados Unidos, Gran Bretaña, Australia, Brasil, Asia, Japón, África, Dubai, Kuwait, etc.), además de la on line. El próximo paso importante de la marca es el lanzamiento de su primer perfume. Firmó un contrato de diez años con la marca de cosméticos Selective Beauty SAS, a través del cual espera la expansión de accesorios de la casa y la creación de la primera fragancia, que lanzará al mercado en la primavera del año 2009.

Es verdad que la historia de Jimmy Choo no se entendería sin la de su mayor impulsora, Tamara Mellon, una joven de la alta sociedad británica que se empeñó en dar todo su apoyo a un zapatero y logró que su pasión, la moda y los zapatos, se convirtieran en un negocio apabullante a nivel internacional en todos los niveles.

Los inicios de Jimmy Choo

Fue en 1969, en Penang, China, cuando un adolescente llamado Choo Kee Yin descubrió su pasión por confeccionar zapatos. Tras ser el mejor de su ciudad, en 1973 (la ciudad china vivía una profunda crisis económica) fue enviado a estudiar a Londres con parte de su familia. Comenzó en la escuela Leather Trades School y en una viaje a la ciudad andaluza de Córdoba descubrió su pasión por el cuero. Regresó tras graduarse en Cordwainers a Penang, pero Londres volvía a reclamarle, especialmente el hecho de poder seguir ampliando conocimientos en el arte de hacer zapatos.

En 1988 ya tenía su negocio montado, pero la presión por no saber hablar bien inglés le llevó a tomar una determinación, no hablaría con la prensa, (en el Financial Times se quedaron alucinados con la respuesta).
Trabajó como asistente en Vogue. Se relacionaba con Sergio Rossi, ya veía en Manolo Blahnik un rival, era el único que creaba moda en calzado. Pero fue una llamada la que cambió el rumbo de su historia. Palacio de Kensington, Diana de Gales quería recibirlo personalmente. Se había corrido la voz sobre un joven diseñador de calzado británico, un artista. (Fue el único diseñador de calzado que estuvo en 1997 en el funeral de la princesa). Y ella quería lucir sus diseños.

La primera boutique se abrió en el número 42 de Knightsbridge. Pasó muchos apuros, especialmente porque no era un hombre de negocios y no sabía gestionar esa parte de la empresa. Y ahí es donde entrar la figura de Tamara Mellon. Ya estamos en los ’90.

La figura de Tamara Mellon

Gracias al apoyo de Tom Yeardye, su padre, Tamara Mellon consiguió la ayuda necesaria para convertir un joven zapatero chino que volvía locas a las británicas con sus diseños, en el imperio que hoy tiene. Inversión, muchos contactos y una buena base, los zapatos.

Es verdad que la figura de Tamara despierta un interés alucinante en la historia, y que parte de su trabajo se ve influenciado por sus relaciones personales, su tortuoso divorcio, su presencia en los medios de comunicación… pero no tengo duda de una cosa, sin ella, la historia de Jimmy Choo sería totalmente distina.
No quiero desvelar todo lo que cuenta el libro, vaya gracia sino, espero que disfrutéis como lo he hecho yo, pero sí os voy a dejar unos cuantos datos de lo que un buen trabajo, dinero y contactos puede hacer:

• En 1997 Jimmy Choo creaba 3.000 pares de zapatos. En 2001, 73.000 pares de zapatos. En 2003, 125.000 pares de zapatos.

• En julio de 2003, Chanel tenía 200 boutiques en todo el mundo. Dior cerca de 250. Louis Vuitton 350, y Jimmy Choo sólo 18 boutiques. Máxima exclusividad.

El imperio actual de Jimmy Choo es alucinante, por no hablar de su fama. Presencia en series de éxito, venta on line, fans por todo el mundo, boutiques en cada ciudad y grandes almacenes que cuentan con un rincón especial para los zapatos británicos. A los que se añaden su línea de complementos.

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Jimmy Choo hoy en día

El 4 de febrero de 2007 la firma fue vendida a un fondo de inversión de Arabia Saudí por 336 millones de dólares. TowerBrook y Lion Capital, fondos de inversión, controlan parte de la empresa actualmente. De la misma manera que Tamara Mellon sigue siendo parte vital y directiva de la firma con la que soñó.
Lion Capital ha expandido su negocio a los productos congelados en Europa, aunque mantiene su vertiente del lujo con Jimmy Choo (el negocio es el negocio). Tamara Mellon trabaja también para Halston y Revlon.
Jimmy Choo dirige el negocio desde su boutique en Bayswater, pero considera que desde finales de 2008 es realmente difícil conseguir materiales para seguir a la cabeza de las tendencias de la moda

¿Quién los lleva mejor?

 

Maggie Grace

 

Garcelle-Beauvais

 

Hilary 

Michelle Obama

Kate Perry

Heidi Klum

Alicia Keys

Chloe Moretz

Krysten Ritter




Charlize Theron

Taylor Schilling



Jennifer Lopez

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Scarlett Johansson

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